Tras atravesar una severa sequía, Argentina se prepara ahora para un posible escenario de lluvias excesivas por el fenómeno El Niño, según informa la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO). Este fenómeno climático podría retornar en junio tras tres años de su contraparte, La Niña, que originó un desplome en la producción agrícola 2022/2023 de casi 50 millones de toneladas entre soja, maíz y trigo.
El Niño y su posible impacto en Argentina
Según estimaciones de FAO y otros organismos internacionales, hay un 73% de probabilidad de que El Niño se manifieste entre mayo y julio de 2023. “En la Argentina, este fenómeno podría aliviar el efecto de la sequía en la agricultura que ocasionó tres años consecutivos de La Niña”, explicó Oscar Rojas, Oficial de Recursos Naturales de la FAO. Se anticipa un aumento en las lluvias en la parte sur del continente, donde se incluye a Argentina.
Los meses críticos y la influencia en la producción de cereales
Rojas explicó que Argentina experimentaría las lluvias más intensas de septiembre a enero próximo, lo cual podría impactar significativamente en el cultivo de maíz. “Una normalización de las precipitaciones en las regiones agrícolas de la Argentina podría significar una producción normal en los cereales”, añadió Rojas. Sin embargo, también advirtió que los impactos por exceso de agua son más difíciles de estimar.
Acciones preventivas y gestión del riesgo
La FAO está alertando a los países sobre los potenciales impactos de El Niño en la agricultura y tiene programas de Acción Anticipatoria para mitigar los efectos adversos de los riesgos climáticos. “El Sistema de Alerta y Acción Temprana es una nueva iniciativa de la FAO desarrollada para reducir enormemente las pérdidas y los costos de respuesta de emergencia”, subrayaron desde la institución.